jueves, 11 de noviembre de 2010

Reseñas de El tapiz del vampiro, de Suzy McKee Charnas

Han aparecido sendas reseñas de El tapiz del vampiro de Suzy McKee Charnas en Literatura Fantástica y Tor.com:

Literatura Fantástica

Tor.com (en inglés)

Recojo esta segunda reseña en inglés, a pesar de que habitualmente no doy cuenta de la aparición de comentarios en otros idiomas, porque me ha llamado la atención que destaca precisamente los aspectos de esta novela que me gustaron mucho cuando la leí por primera vez, y que están igualmente subrayados en la excelente reseña de Mariano Villarreal.

El vampiro Weyland es una criatura más natural que sobrenatural, y la explicación del vampirismo que ofrece la autora es perfectamente racional. Inicialmente, Weyland es una suerte de espejo en el que se reflejan los diferentes personajes que entran en contacto con él (y que, contrariamente a lo que esperaríamos, no son siempre víctimas), descritos con una profundidad psicológica que rara vez se encuentra en el fantástico comercial. Pero además, sufre un proceso de humanización progresiva que resulta potencialmente letal para su posición de depredador del ganado humano: la empatía hacia sus presas es esencial para mimetizarse con ellas, pero a la larga resultaría en su destrucción.

En esencia, El tapiz del vampiro es un libro fundamentalmente ajeno al sentimentalismo que domina el subgénero vampírico, aunque profundamente romántico en el sentido propio de la palabra: ¿quién más aislado como individuo singular que Weyland, quién más en contacto con las fuerzas motoras de su propia naturaleza? No soy el monstruo que cae víctima de sus sentimientos humanos, dice Weyland; soy el monstruo que perdura. Por eso el final de esta novela es tan perfecto y definitivo, y por eso el vampiro Weyland permanece en nuestra memoria mucho después de cerrar el libro.

1 comentario:

  1. Por cierto, Arty: En este caso y aún cumpliendo todos los requisitos de la moda crepuscularia, tú portada me parece buenísima buenísima ( la mejor en " ese" estilo, de hecho). Un abrazo. Victorderqui.

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