martes, 31 de julio de 2012

Reseña de Cismatrix, de Bruce Sterling

Ha aparecido la siguiente reseña de Cismatrix de Bruce Sterling:

Leyenda

De la reseña destaco este párrafo: "Cismatrix es el nombre que se da en la novela a la humanidad (o posthumanidad) dispersa por el espacio. Es decir, a toda menos a la que permanece en la Tierra. En esa vasta humanidad, las clases dirigentes se encuentran divididas en dos ramas principales que buscan lo mismo: la inmortalidad o el alargar la vida el máximo. Los formistas lo hacen mediante selección de líneas genéticas (en esto el libro recuerda a Dune y sus Bene Gesserit), modificaciones hormonales, dérmicas, enzimáticas, neuronales, etc., y los mecanistas lo hacen mediante implantes o prótesis mecánicas. Ambas ramas se encuentran en plena guerra fría al comienzo de la novela, y cada sección tiene a su vez subsecciones enfrentadas entre sí".

martes, 24 de julio de 2012

Nuevas reseñas de El sol en esplendor, de Sharon Kay Penman

Se han publicado dos nuevas reseñas de El sol en esplendor de Sharon Kay Penman, la primera entrega de La Guerra de las Rosas:

Suite 101

Novela Histórica

De la primera reseña destaco: "La historia de Ricardo III aún hoy, 500 años después de su muerte, fascina y hechiza. Traicionado en la vida por sus aliados, la historia le traicionó en la muerte. El sol en esplendor es una historia política que, en primer lugar, es intensamente humana y que nos transmite una imagen cuidadosamente elaborada de la Inglaterra medieval de la alcoba al campo de batalla. Aunque ficticia, la historia de Penman está sólidamente basada en documentos históricos; la autora introduce algunos supuestos de cosecha propia a lo largo de la narración, sobre todo en lo referente a la historia de amor entre Ricardo y Ana Neville, pero sus teorías son totalmente factibles".

Y de la segunda: "El sol en esplendor, cuya continuación Señor del norte ya está en las librerías, nos describe con precisión un país destrozado por las luchas por el poder entre nobles y reyes. Un rey loco, Enrique VI, guiado por su ambiciosa esposa de origen francés Margarita de Anjou luchará contra las nobles familias de la casa de York y la casa de los Neville. Ése es el inicio de una novela cuyo protagonista principal es Ricardo, hijo menor de la casa de York. A partir de este punto, El sol en esplendor nos guía a través de cambios de alianzas, batallas, asesinatos a sangre fría, traiciones y precipitadas huidas, todo narrado con precisión quirúrgica por Sharon Kay Penman, que reconstruye la historia con gran habilidad, sabiendo dar vida propia a cada uno de los personajes principales, desarrollando sus miedos, dándonos a conocer sus ambiciones y haciéndonos sentir sus debilidades, llegando hasta el fondo de una historia tan bien construida como fácil de leer."

En esta entrada de Artifex Plus encontraréis una reseña anterior de este mismo título.

martes, 17 de julio de 2012

Nuevas reseñas de Rito de paso, de Alexei Panshin

Han aparecido dos nuevas reseñas de Rito de paso, de Alexei Panshin:

Lecturofilia

El Posalibros

De la primera reseña destaco: "Ésta es una historia de aventuras, sí, pero también lo es de superación, crecimiento, de desarrollo de valores, de cómo llega un momento en la vida en el que has de cuestionarte el orden establecido, de cómo superar los prejuicios... Para mí, cuando encaro una novela futurista de ciencia-ficción, es muy importante ir descubriendo gradualmente las reglas de la sociedad que describe, de una forma orgánica, y así es justo como acontece a lo largo de la lectura de Rito de paso. Cuando el novelista se obstina en presentar la genialidad de la sociedad que ha ideado de forma explícita, evidente y patente me produce cierto rechazo. Panshin es un maestro en ese sentido."

Y de la segunda: "Gracias a la acertadísima reedición de Rite of Passage (1968), la olvidada novela del no menos olvidado Alexei Panshin, me decidí a desempolvar un viejo ejemplar de Rito de iniciación (Rito de paso en la edición de Bibliópolis) editado por Dronte en su colección Antares en 1974, que seguramente adquirí en alguno de los muchos saldos que ha vivido el género de la ciencia-ficción. Y lo que son las cosas, al final Rito de iniciación ha sido una de las lecturas más gratificantes del año; una novela publicitada como una intrascendente aventura de adolescentes destinada a ser un divertimento pasajero ha resultado ser una lectura bastante más compleja que esa aproximación a las novelas juveniles del maestro Heinlein, abordando temas de más calado que las simples peripecias afectivas y existenciales de una joven en pleno proceso de madurez".

En este mismo blog podéis encontrar entradas anteriores con otras cinco reseñas de Rito de paso aquí, aquí y aquí.

martes, 10 de julio de 2012

Nuevas reseñas de Las Monarquías de Dios, de Paul Kearney

En las últimas semanas han aparecido nuevas reseñas de varios títulos de la pentalogía Las Monarquías de Dios, de Paul Kearney, que os presento reunidas en una única entrada:

El viaje de Hawkwood en Casa de Libros Perdidos

Las guerras de hierro en Un Tintero de Sapphire

Naves del oeste en La Biblioteca del Kraken

Naves del oeste en Via News

De la reseña de El viaje de Hawkwood destaco: "Si te has leído o te estás leyendo la Saga de Geralt de Rivia, léete también esta saga porque te va a gustar (MUCHO). Si te estas leyendo la saga de Canción de Hielo y Fuego, léete también esta saga (y la de Geralt de Rivia) porque te va a encantar. Si te has leído alguna de las sagas de Dragonlance y necesitas leer algo diferente pero de una temática parecida, aquí tienes tu nueva saga favorita. Brujos, magos, homúnculos, hombres lobo (aquí los llaman cambiaformas), reyes, clérigos locos, batallas épicas, sexo, intrigas palaciegas, conspiraciones y un viaje hacia lo desconocido. Todo esto y más es lo que vas a encontrarte en este primer libro de la saga."

En la reseña de Las guerras de hierro me ha gustado particularmente esto: "Con cada nuevo libro de la saga, la pluma de Kearney se vuelve más sólida, centrando la atención en uno u otro punto, comprimiendo unos hilos y ocultando otros con el fin de dar una mayor cohesión al conjunto y creando la tensión necesaria al tiempo que genera expectativas y misterio por las líneas argumentales que permanecen en la sombra. (...) En definitiva, una obra que no para de crecer, y que sigo pensando se muestra como una de las sagas fantásticas más apasionantes e interesantes de los últimos tiempos y que me parece, por lo tanto, de lo más recomendable por estos pagos literarios".

Esto es lo que tiene que decir sobre Naves del oeste la primera reseña: "Naves del oeste es el título del último volumen de la saga Las Monarquías de Dios, el que cierra el ciclo iniciado por El viaje de Hawkwood y que durante este pasado 2011 me ha dejado atrapado intensamente en su lectura. Éste era un libro sin duda esperado, deseado, pues las tramas que poco a poco fue tejiendo el irlandés Paul Kearney debían confluir en buena parte en esta última entrega. Digo en buena parte porque algunos de los hechos principales ya fueron dirigidos para finalizar en el magnífico volumen pasado, El segundo imperio. El presente libro está dedicado a concretar las líneas argumentales más vinculadas con los asuntos mágicos y la probable invasión proveniente del Continente Occidental".

Y esto es lo que destaco de la segunda: "Ha llegado el día que nos temíamos que no llegase, por fin se ha terminado de publicar Las Monarquías de Dios, a pesar de todos los problemas ya tenemos la pentalogía completa y la verdad es que las buenas sensaciones que nos habían ido dando los volúmenes anteriores se confirman al 110%. Las Monarquías de Dios es una de las sagas de fantasía más interesantes que se publican en la actualidad... ¡y una de las pocas que ha culminado su publicación!".

Podéis encontrar otras reseñas recientes de diversos títulos de esta saga en entradas anteriores de Artifex Plus (aquí, aquí, aquí, aquí y aquí), así como en la sección "suscripciones".

martes, 3 de julio de 2012

Reseña de El enviado de Roma, de Wallace Breem

Recientemente ha aparecido la siguiente reseña de El enviado de Roma, de Wallace Breem:

C

Destaco el siguiente párrafo de la reseña: "Muy diferente a El águila en la nieve y más centrada en las argucias diplomáticas y los manejos políticos que en la épica militar, El enviado de Roma (The Legate's Daughter, en el original) es una compleja novela que recuerda mucho el estilo de Gene Wolfe y que le habrá roto los esquemas al habitual de la literatura histórica que inunda las librerías: lenta, plagada de elipsis muy bestias, acontecimientos que no se explican claramente, bruscos diálogos que abundan en referencias que el lector desconoce, situaciones que no revelan su verdadero sentido hasta pasadas unas cuantas páginas, un final que deja multitud de cabos sueltos... Pero nada de esto es gratuito. Breem, como ya ocurría en El águila en la nieve y su austeridad militar, adopta el estilo que mejor se ajusta a lo que quiere contar, en este caso la descripción de los difusos engranajes de la Historia y cómo las peripecias más insignificantes, las de la gente corriente, son las que mueven dichos engranajes. Porque la propia Historia, tal y como la percibimos los pringaos que la sufrimos día día, no es más que una serie de acontecimientos inconexos, que pertenecen a un orden mayor pero inextricable, como los mensajes cifrados que recibe Curcio desde Roma, acontecimientos de los que desconocemos sus motivos y que escapan a nuestro control. Un sendero por el que avanzamos a tientas como mejor podemos, donde incluso los momentos de triunfo resultan insatisfactorios y carentes de sentido y ni siquiera Rufo recibe en compensación un conocimiento mayor sobre el mundo que le rodea, pero a cambio sí aprende algo sobre sí mismo".

jueves, 28 de junio de 2012

Habla el traductor: Trilogía de Fundación, de Isaac Asimov

Tras las entradas anteriores, en que Manuel de los Reyes nos hablaba de Sólo el acero (aquí) y Carlos Gardini de Shadowmarch. La frontera de las sombras (aquí), volvemos a contar con Manuel de los Reyes para que en esta ocasión nos narre su experiencia con Trilogía de Fundación de Isaac Asimov, algo que como veréis ha abordado de forma muy original.

* * *

Trilogía de Traducción

[1]
Traducción

Cuentan que un buen día, en un país que limitaría con España de no ser por la terca inmovilidad de Francia, un traductor de modestas aspiraciones y equiparable aptitud recibió un inteligrama que habría de alterar absoluta e irreparablemente su hasta entonces plácida existencia. El fatídico -mas no por ello menos escueto- comunicado rezaba, palabras textuales: "[...] planes para volver a traducir la trilogía de las Fundaciones de Isaac Asimov. ¿Aceptas? y/n".

El alocado protagonista de nuestra historia, víctima de quién sabe qué extraña trepidación, se apresuró a rechazar semejante ofrecimiento, comprensiblemente temeroso de no estar a la altura de una empresa que llevaba décadas ocupando a sus compañeros de gremio más abnegados. "Yo no...", comenzó a teclear. Era tal su precipitación que, ¡ay!, demasiado tarde reparó en el hecho de que la primera letra de su misiva no había sido otra que la Y, precisamente aquella que se proponía evitar, aquella que no debería haber oprimido jamás... a menos que alguien estuviera manipulando su subconsciente, alguien cuya identidad continúan negándonos aun los más pormenorizados códices de la galaxia.

¿En qué nueva temeridad se había embarcado? ¿Qué terrible pecado se empeñaban en hacerle pagar las fuerzas invisibles que mueven los hilos editoriales de nuestro universo? Hubieron de transcurrir varios microciclos antes de que el citado traductor, atemperado ya en parte por varios cilindros expulsores de humo azulado y no pocas visitas al dispensador de grappa venusiano, diera en desenredar las últimas madejas de duda que quedaban enganchadas en su mente y aceptara el último encargo de su misterioso benefactor como lo que en realidad era: un desafío. Una oportunidad. Y -¿por qué no decirlo?- un honor.

[2]
Segunda Traducción

Comoquiera que el héroe a su pesar de nuestro relato contaba en su haber, en el momento de acometer esta nueva empresa, aproximadamente con 2.000 páginas traducidas al español de Isaac Asimov -repartidas entre varias antologías y recopilaciones de relatos-, cabría suponer que atacó el encargo investido de no pocas dosis de confianza, aderezadas tal vez con un pizca del característico atrevimiento que afecta a quienes ejecutan una y otra vez las mismas tareas. Nada más lejos de la verdad. Suficiencia y presuntuosidad no son palabras que consten en los diccionarios que nuestro traductor tenía a su disposición. Y tenía muchos.

Antes bien, como impulsor que había sido de una serie de holotratados que versaban, precisamente, acerca del noble y no pocas veces incomprendido arte de la retraducción (a disponibilidad de los eruditos galácticos aquí y aquí), no tardó en sucumbir a la glacial serenidad propia de quienes tienen ante sí una labor importante. Envuelto, por tanto, en los escudos deflectores de distracción que tantas veces habían salvado su trabajo en el pasado, se arremangó y enumeró para sí las características que habrían de marcar su estrategia: lo que -quizá comprensiblemente- todavía nadie ha pensado en denominar "Las Tres Leyes de la Retradubótica".

1
Un traductor no debe copiar la traducción de ninguno de sus antecesores ni, por falta de inspiración, permitir que la traducción de sus antecesores influya en la suya

2
Un traductor debe obedecer aquellos parámetros de la antigua traducción con los que estén familiarizados los lectores, salvo cuando dichos parámetros contravengan las leyes de la Semántica y la Morfosintaxis

3
Un traductor debe ser capaz de justificar las discrepancias que introduzca en su propia traducción, siempre y cuando dichas justificaciones no contravengan ni la Primera ni la Segunda Ley
Repitiendo como un mantra, para sus adentros, este sencillo trío de directrices, el traductor puso manos a la obra. ¡Y qué obra!

[3]
Los límites de la Traducción

Pues, como bien saben todos los habitantes de la Federación civilizada, la Trilogía de Fundación -compuesta por Fundación, Fundación e Imperio y Segunda Fundación- lleva siete décadas ganando adeptos para la causa de la ciencia-ficción novelada. Algunos cronistas aseguran que no son pocos los curtidos lectores que la cuentan entre sus obras de referencia y la recomiendan sin paliativos para iniciarse en el género... género del que cabe suponer que sea uno de los máximos exponentes, habida cuenta de las muchas veces que se ha reditado y retraducido.

De las versiones más recientes de tan magna obra, firmadas por correligionarios contemporáneos como Manuel Mata Álvarez-Santullano o Marta García, con los que el traductor de nuestra historia ha tenido el gusto de tratar en un pasado no muy lejano, nuestro protagonista resolvió no extraer ningún referente terminológico. Esta decisión surge del voto que había hecho años atrás, al enfrentarse a su primera retraducción de los cuentos de Asimov: apoyarse nada más que lo imprescindible en las traducciones de términos inventados durante los años setenta, cuando desembarcaron en España las primeras historias de Asimov en castellano, para no antagonizar de frente con los aficionados más veteranos del Buen Doctor. Consustancial a ese propósito era la voluntad de crear un corpus lingüístico propio, con una coherencia interna sólida, que permitiera a los nuevos lectores reconocer el tono y la voz de Isaac Asimov de una novela a otra, de uno a otro relato. O, dicho de otra manera, que los visiphones de los distintos originales fueran siempre visífonos en las distintas traducciones, y no «videófonos» o cualquier otro palabro.

Esto significa que los lectores más veteranos, los que se dejaron seducir por la Fundación traducida de Pilar Giralt en los setenta, reconocerán términos tan emblemáticos como el antedicho vísifono, Primer Orador, Era Galáctica o Neotrantor. Los warlords of Kalgan, sin embargo, ya no son «señores» -a secas- de Kalgan, sino caudillos; y los aircars ya no son «coches aéreos», sino aerocoches, entre otras modificaciones sutiles pero inevitables si se pretende imponer siquiera un atisbo de homogeneidad terminológica entre las distintas novelas traducidas de Asimov.

Mas cometió el protagonista de nuestra historia un error... varios, sin duda, pero al menos uno de bulto: implicarse en el ingente proyecto que lo ocupaba hasta descubrir que ni siquiera los clásicos -o quizá los clásicos menos que ninguna otra obra, por su ilusoria condición de incontrovertibles- están a salvo de los caprichos de los duendes de la imprenta y la tijera vil del censor. Le sobrevino esta epifanía devastadora mientras bosquejaba las últimas líneas de Fundación e Imperio, durante el discurso final de uno de los personajes más emblemáticos de la serie. En él, el citado personaje declara ante otra persona: "Si las cosas fueran de otro modo, hacerla feliz sería lo más sencillo del mundo", pero esas palabras (If things were otherwise, I could make you happy very easily, en el original) no constaban en el texto de partida del que disponía nuestro traductor... mientras que, tras cotejar otras traducciones antiguas, saltaba a la vista que algunos de sus antecesores sí habían tenido acceso a otros documentos más completos. ¡Eso abría un preocupante abismo de incertidumbre a sus pies! ¿Qué hacer?

Comenzó entonces una frenética búsqueda de materiales de referencia en pos de párrafos expurgados, frases censuradas, palabras misteriosamente desaparecidas... una búsqueda tan exhaustiva como infructuosa que devino en un injustificable retraso en la entrega de su trabajo, y todo por aquella simple declaración, aparentemente inocua: "Si las cosas fueran de otro modo...". Pero no lo eran, nuestro protagonista se había obsesionado con la búsqueda de esa entelequia que es la traducción perfecta, una falacia quimérica que llegó a hacerle perder días enteros analizando cuál podría ser la mejor manera de transmitir la ascendencia judía de uno de los protagonistas, evidente en algunas de las locuciones con las que se expresaba (Time, shmime!), antes de que las personas cercanas a él le obligaran a respirar hondo y apartar la nariz de su trabajo. A unos pasos de distancia, como mejor aprecian todos los creadores sus obras, nuestro protagonista comprendió que la «traducción perfecta» no existe, tan sólo la «mejor traducción posible en un momento dado». ¿Era eso lo que tenía ante sus ojos?

Era, cuando menos, lo mejor que podía dar de sí en esos momentos. Había llegado la hora de comprimir su trabajo, adjuntarlo a un inteligrama y remitírselo todo a su misterioso benefactor. Satisfecho, ya sólo le resta esperar que los demás ciudadanos de la galaxia disfruten tanto como él de la que es, sin lugar a dudas, una de las obras cumbre más inmortales que nos ha legado la literatura de ciencia-ficción.

sábado, 23 de junio de 2012

Recibida la traducción de Los guerreros de Dios

Hace unas semanas, Fernando Otero Macías (que ha realizado el grueso del trabajo) y José María Faraldo (que ha revisado amablemente el texto de Fernando) han terminado la traducción de Los guerreros de Dios de Andrzej Sapkowski, el título que continúa la Trilogía de las Guerras Husitas tras Narrenturm. Si todo va bien, este título se pondrá a la venta el próximo mes de septiembre.

Como habréis advertido, se ha convertido en costumbre en este blog no avisar de la publicación de nuestros próximos títulos hasta que ya los tenemos prácticamente encima. Esto se debe a que no es nada agradable anunciar un libro que luego se retrasa, por lo que he preferido cada vez más no pillarme los dedos. Y como es sabido, cuando se trata de las traducciones de Sapkowski, el retraso es poco menos que inevitable.

Por esa razón aún no había dado la noticia de la finalización de la traducción de Los guerreros de Dios, pero hace poco he recibido un mensaje de un lector interesándose por él y lamentando la falta de noticias al respecto, y he entendido que, una vez tenemos la traducción en la mano, merecía la pena anticipar ya la fecha de publicación de este libro.

Así que ya lo sabéis: Los guerreros de Dios de Sapkowski, en septiembre en Alamut.

martes, 19 de junio de 2012

Nuevas reseñas de Sólo el acero, de Richard Morgan

Os traigo dos nuevas reseñas de la novela Sólo el acero de Richard Morgan:

La Espada en la Tinta

Via News

De la primera reseña me gustaría destacar este párrafo: "El mundo que el autor nos presenta en Sólo el acero es, por así decirlo, un tipo de fantasía épica a la que podemos definir tranquilamente como fantasía crepuscular. Lejos de los habituales estereotipos de la fantasía, de grandes héroes que son protagonistas de las leyendas que escuchan los niños en la cama antes de dormir, lo que Morgan quiere hacernos ver es que todo puede tener también su lado malo, o más bien "degenerado". No quiero decir que los héroes de Sólo el acero sean unos villanos de tomo y lomo ni mucho menos, sino todo lo contrario. Son héroes que han conocido tiempos mejores (por más que dos de ellos superen en poco los treinta años de edad), fueron partícipes de una lucha pasada a la que a menudo hacen mención, e incluso sueñan con ella en sus peores -o mejores- pesadillas. Tanto Egan el Matadragones como Ringil "Ojos de Ángel" Eskiath, o Archeth Indamaninarmal, mitad humana, mitad kiriath -una desaparecida raza con conocimientos de tecnología avanzada, cuasi inmortales-, son los protagonistas de esta fantasía crepuscular que habla de tiempos pasados que fueron mejores que los presentes, aunque dichos tiempos significaron en su momento un espeluznante baño de sangre que el mundo trata de olvidar, no así nuestros héroes".

Y de la segunda: "De un tiempo a esta parte la fantasía está madurando, yendo un paso más allá de lo que venía a ser el "viaje del héroe", la epopeya que le lleva a crecer, madurar y derrotar al villano. Personalmente comencé a palpar esos comienzos con Añoranzas y Pesares, de Tad Williams (curiosamente Alamut acaba de publicar Shadowmarch, del mismo autor, libro al que estaremos atentos), donde el héroe las pasaba realmente canutas, donde la historia se volvía algo más cruda. Esa trilogía me permitió avanzar un pasito como lector y buscar algo de fantasía más adulta, algo que era más complicado en aquellos momentos y que ahora se ha vuelto más habitual, gracias en gran parte al éxito de Canción de Hielo y Fuego, aunque no es menos cierto que la saga de Malaz, la Primera Trilogía, Las Monarquías de Dios, etc., también han abonado un camino que ahora transitan muchos autores con gran acierto. Sólo el acero es una novela, primer libro de la trilogía A Land Fit For Heroes, que ha cosechado un gran éxito de crítica y ventas y que nos ha llegado de la mano de Alamut en una gran edición."

En esta entrada podréis encontrar otra reseña de Sólo el acero, y en esta otra la presentación que le dediqué en Artifex Plus.

viernes, 15 de junio de 2012

Novedad: Trilogía de Fundación (edición coleccionista), de Isaac Asimov


Se ha puesto a la venta Trilogía de Fundación (edición coleccionista) de Isaac Asimov, que incluye en un solo tomo las novelas Fundación, Fundación e Imperio y Segunda Fundación con nueva traducción de Manuel de los Reyes.

En esta entrada de Artifex Plus encontraréis mi presentación de este título.

jueves, 7 de junio de 2012

Reseña de Shadowmarch. La frontera de las sombras, de Tad Williams

Os traigo la primera reseña que ha aparecido de Shadowmarch. La frontera de las sombras, de Tad Williams:

Sagacomic

De ella destaco el siguiente párrafo: "Shadowmarch es un principio de serie muy satisfactorio. Una novela argumentalmente compleja, con diversas líneas -muchas más de las que podría especificarse en una reseña sin chafar las sorpresas- y multitud de personajes, con abundantes giros y sorpresas. Llena de acción épica -aunque tampoco haya exactamente grandiosas batallas, los combates, con su extraña ambientación brumosa y desconcertante, dejan más que satisfecho- que permite no obstante los momentos justos para algún romance normalmente trágico. Y sobre todo es una historia cargada de intrigas, tanto en el norte como en el sur, haciendo que no se sepa en ningún momento en quién se puede confiar realmente, quiénes son los buenos y quiénes los malos, donde cualquier descuido puede acarrear funestas consecuencias, donde la lucha por la supervivencia y la conservación del poder no deja respiro, donde los supuestos amigos no siempre muestran su verdadero rostro, y donde las espadas pueden volverse contra uno en el momento más inesperado... Un mundo de magia por explorar, desconcertante y furiosa, de gigantes dormidos y reyes ciegos, con una frontera en disputa y ominosas amenazas por todos lados".

En Artifex Plus podéis encontrar la presentación que hice de este título (aquí), así como un comentario del traductor, Carlos Gardini, sobre algunos aspectos de su trabajo (aquí).